Un estudio multicéntrico liderado por el Instituto de Investigación Sant Pau (IR Sant Pau) y el Hospital de Sant Pau, publicado en la revista Neurology, demuestra que la aplicación precoz y coordinada de un protocolo integral de atención mejora significativamente la recuperación funcional de los pacientes con hemorragia intracerebral espontánea, una de las formas más graves de ictus.